Especial para Autorutas/Enrique Kogan

Para los que no conocen la marca, “McLaren Automotive” es un fabricante de automóviles británico fundado en 1963 por el conocido piloto neozelandés Bruce McLaren.

La automotriz produce y fabrica automóviles deportivos y de lujo, generalmente producidos en las instalaciones de producción designadas para ellos, y una de las que está dando que hablar es la que produce sus modelos de fibra de carbono, como el “McLaren MSO Carbon Series”, que ya está totalmente vendido.

Sólo 25 de estos vehículos McLaren MSO Carbon Series LT han sido creados por el brazo especializado de la marca, “McLaren Special Operations”. El último carro en ser construido, ya ha sido vendido a un comprador anónimo a un precio no revelado.

El vehículo viene envuelto en fibra de carbono. El material ligero y resistente se teje en un patrón intrincado y se adapta perfectamente para abrazar su cuerpo muscular tonificado.

Inspirado por el carbono P1 mostrado en el auto show de Ginebra del año pasado, este auto cuenta con un 40% más de fibra de carbono que el 675LT Spider. La fibra de carbono en el cuerpo y el chasis expresa lo que es el vehículo. En otras palabras, el carbono visual articula el peso ágil del auto y el alto rendimiento, valores que van al corazón de la marca.

Este tipo de vehículo hecho de carbono requiere un conjunto muy específico de habilidades y demandas muchas horas hombre, por lo que se hacen en pequeños lotes y se venden a precios altos. Es un trabajo intrincado y experto y el proceso es muy, pero muy lento.

El carbón tiene muchos beneficios para aplicaciones automotrices. Es un material increíblemente delgado, de ingeniería única y la relación entre la fuerza y ​​el peso es extremadamente alta.

Con algunos de los tejidos de tela cruzada más complejos, que crean una superficie de crestas diagonales paralelas, se puede perder un poco de rendimiento, pero se supone que son más de un diseño estético.

Para aplicaciones en interiores, se tiene más flexibilidad con el tejido, mientras que en áreas donde el rendimiento es clave, el exterior y el chasis por ejemplo, el tejido de carbono necesita ser más fuerte.

El proceso comienza con el textil crudo del carbón, que se moldea con resina para crear estructuras rígidas para la aplicación automotriz. La resina se añade en una cantidad óptima para que sea lo más fuerte y ligera posible.

A continuación, una vez impregnado puede ser acabado en un brillo completo, satinado o mate laca clara de la capa junto con color claro tintado en capas. La fibras adicionales también pueden ser entretejidos en la estructura de carbono, como entretejidos de oro a platino, titanio y otros metales preciosos para crear una estética única.

El carbón se teje usando un telar grande del tamaño de la producción. El más común y óptimo es el tejido de sarga de dos por dos que da como resultado una estructura de espiga de pescado.

El carbono es un material extremadamente permisivo y permite la libertad de diseño al permitir el procesamiento de formas más complejas y curvas.

Las capas más gruesas del material harán para el carbono sea más rígido, mientras que las capas más delgadas permiten una mayor plasticidad que en combinación pueden optimizar áreas de función cuando sea necesario.

Ademas del McLaren 675LT MSO Carbon Serie LT, habrá un vehículo, que por ahora está en secreto, el “Ultimate hyper-GT”, el potente híbrido de tres plazas inspirado en el McLaren F1 original y ofrecido en número limitado en 2019.

Estos se tratan de automóviles muy a medida y sólo 106 unidades están siendo creadas por la automotriz británica.

Se espera que cuando el hiper-GT llegue al mercado, se verá un aumento para los clientes que quieran anunciar y adaptar el tejido de su carbono al vehículo.

Hace unos años la automotriz produjo un modelo personalizado llamado X1. El comprador había pedido que desarrolláramos un nuevo carbono para el interior con un metal de titanio. Y la automotriz cumplió con el pedido.

A medida que la historia del lujo evoluciona a significar mucho más que el precio de un objeto, ya que cada vez se ha vuelto más sobre la originalidad, la rareza, las habilidades, la artesanía y la narrativa del vehículo que toma su protagonismo.

McLaren y la fibra de carbono comparten una historia íntima, que le está dando exclusivos resultados.