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La última vez que vimos una Ford Ranger fue en el año 2011, y para entonces era una plataforma ya antigua, que se remontaba al año 1983. 

No había sufrido una actualización significativa desde principios de la década de los 90, cuando las pickup compactas no llamaban mucho la atención.

Ahora, con la Ranger del 2019, construida en la Planta Ford en Wayne, Michigan, la pick up mediana hace su esperado retorno. para reafirmarse como un serio contrincante en un segmento en crecimiento.  

Modelos y opciones

Los distintos modelos y niveles de equipamiento disponibles son los XL, XLT y Lariat, y podrá encontrarles en versiones con  tracción trasera y tracción a las cuatro ruedas a tiempo parcial; esta última puede actualizarse con el paquete FX4 Off-Road.

Además, usted puede elegir una cabina de tripulación con una cama corta o una cabina extendida con una cama estándar. 

Las ruedas varían desde unidades de acero de 16 Pulgadas a unidades opcionales de 17 o 18 pulgadas. Las opciones en los modelos todo-terrenos son muy parecidas a la F-150 Raptor.  Siguiendo las opciones, se puede pedir con el paquete de apariencia cromada o un paquete de apariencia deportiva.

El paquete FX4 Off-Road, incorpora características como placas de protección, llantas mejoradas, amortiguadores y suspensión fuera de carretera. El paquete también agrega el sistema de gestión de terreno y el control de senderos.  

Motor y trasmisión 

La Ranger viene solamente, y por ahora, con un motor de 4 cilindros turbo, de 2.3 litros con 270 caballos de fuerza y 310 libras pies de torque, acoplado a una transmisión automática de 10 velocidades. 

Ford tiene la confianza suficiente en este tren motriz, para asignarle una capacidad máxima de arrastre de 7,500 libras, con todas las combinaciones de cabina y cama, lo que lo convierte en el líder de la clase entre los camiones medianos de gasolina. Además tiene una carga útil de 1,860 libras. 

Diseño de interiores  

Los asientos delanteros brindan más apoyo y ofrecen mejor espacio para la cabeza, comparados por ejemplo con la Toyota Tacoma. Los asientos traseros tienen suficiente espacio para adultos de tamaño medio. 

El conductor tiene una variedad de funciones para los equipos de computación y tabletas. Una perilla giratoria controla el estado de la caja de transferencia, del 4×4, e incluye un modo de remolque neutral para habilitar el remolque de cuatro, abajo, detrás de un auto caravana. 

Los botones para habilitar el control de sendero y el control de descenso de pendientes y el diferencial trasero de bloqueo, son muy fáciles de manipular. 

Otras opciones incluyen Ford+Alexa, con control de voz mejorado, navegación incorporada y un sistema de sonido premium B&O Play by Bang & Olufsen. 

La conectividad de Apple CarPlay y Android Auto vienen de serie con la configuración, y el Sync 3 funciona bien, y es fácil de usar y ver, ya que está equipada con gráficos muy nítidos. 

Seguridad 

Además de las normales bolsas de aire, el frenado automático de emergencia viene de serie. Avance un paso hasta el XLT y la lista de características de seguridad activas incluye advertencia de cambio de carril con asistencia de mantenimiento de carril, un sistema de monitoreo de puntos ciegos, control de crucero adaptable y un frenado automático de emergencia mejorado con detección de peatones. 

En carretera 

Lo probé en el camino a un rancho en las afueras de San Diego, California. Su motor turbo-alimentado de 2.3 litros se siente  increíblemente bueno y me pareció que es bastante mejor que cualquier V6 en el segmento. 

En carretera, conduce mas suave de lo que uno espera de una pickup. La dirección electrónica asistida está bien afinada y las esquinas se despachan con un giro menor del cuerpo. El motor EcoBoost nunca parece que se cansa y produce solo un sonido decente.

Al presionar un poco el acelerador se nota un cambio muy rápido,  al colocar la palanca de cambios en la posición sport, la velocidad se mantiene, pero su posición cambia un poco más en el rango de revoluciones. 

El tamaño es más compacto que la F-150, lo que también la hace más fácil de conducir en cualquier curva. Conduce como un vehículo más pequeño, ya que la cremallera de la dirección es apretada y sensible, y la suspensión Sport endurece la marcha, lo que hace sentirla muy sólida en el camino. 

Durante las pruebas en la tierra, note que el sistema de gestión del terreno del Ranger 2019 permite al conductor optimizar el control de tracción y la respuesta del acelerador para tres escenarios todo terreno: césped, grava y nieve, barro y surcos, y arena. 

Pero el Ranger FX4 también tiene algo que se llama control de senderos, que funciona cuesta arriba y en un terreno plano y disparejo. 

Básicamente, se trata de un control de crucero off-road de baja velocidad que manipula el acelerador y administra el giro de las ruedas para que el conductor pueda concentrarse en elegir la mejor línea sobre y alrededor de los obstáculos. 

Conclusión 

La Toyota Tacoma, GMC Canyon y la Chevy Colorado, ya tienen por qué preocuparse. La Ford Ranger podría ser un éxito instantáneo, especialmente entre los fanáticos de Ford que se alejaron a otras marcas cuando la automotriz abandonó el segmento de camionetas de tamaño mediano. 

Su larga espera casi ha terminado, porque el nuevo Ranger está programado para salir a la venta a principios del 2019, y estoy seguro que estará en la lista de todos los compradores de pickup medianas.  

Precio sugerido: Desde US$ 24.300   

Consumo: 21 mpg ciudad, 26 mpg carretera.