Especial para Autorutas/Enrique Kogan

El Dodge Dart una unión forzada entre Fiat y Chrysler, le llego el ultimo y fulminante dardo de la eutanasia, y dejara de fabricarse a fin de mes.

Luego de 4 años y 4 meses de fabricación, este sedán compacto no tuvo el impacto necesario para poder mantenerse en el mercado.

La desaparición del Dodge Dart y su hermano el Chrysler 200, evocan los incómodos recuerdos a la quiebra de Chrysler en el 2009.

Antes de su bancarrota el fabricante de automóviles tenía una línea de productos llena de camionetas, SUVs y minivans. Un fuerte repunte en los precios del combustible luego de salir de la bancarrota, dejó a muchos consumidores la cuestión lógica de ir al trabajo en grandes vehículos que consumen mucha gasolina, o adquirir pequeños sedanes.

Con esa expectativa y mucho ruido, nacieron el Dodge Dart y el Chrysler 200, pero con la baja de la gasolina,  la demanda de vehículos de bajo consumo se pinchó, y Chrysler ya no tenía mucho por ofrecer, con el lógico derrumbe de sus ventas, que luego fueron repuntadas por la marca Jeep.

El mes pasado, las ventas del Dart cayeron a su nivel más bajo desde el lanzamiento del modelo en 2012. Desde que salió a la venta en mayo de 2012, tanto el Dart como el 200 nunca han pasado del octavo lugar en ventas, en un segmento dominado por el Toyota Corolla y el Honda Civic.

Los dos modelos fueron concebidos debido a la política, con el acuerdo de la quiebra de Chrysler en el 2009, que exigió que para ser rescatada construya un vehículo que gaste solo 40 millas por galón en los Estados Unidos.

Las versiones anteriores del acuerdo requieren que únicamente tal vehículo se construirá en un país del TLC (tratado de libre comercio). En su momento Fiat, que se adquirió la mayoría de las acciones de Chrysler, tenía la intención de utilizar el Fiat 500 incorporado en México para cumplir con el requisito, pero no fue así.

Tanto el nacimiento del Dart como el 200 fueron trabajosos, con lanzamientos problemáticos y márgenes muy estrechos de beneficios.

Sin embargo, tan pronto cuando los primeros vehículos vendibles del Dart salieron de la línea de montaje en Mayo del 2012, fue considerado y por lo menos en un criterio importante, por periodistas de automóviles, como un éxito.

Yo predije que no, tanto fue así que los publicistas de FCA dejaron de invitarme a algunos de sus eventos, por hacer una predicción negativa de los dos modelos.

En los concesionarios, el Dart sustituyó al horrible Dodge Caliber y se suponía que pudiera ser un éxito en la línea del segmento de los vehículos compactos de lo que es ahora Fiat Chrysler.

Los modelos eran el eje de una estrategia de intercambio de plataforma que conducía a futuras ofertas de productos de la compañía. Sin embargo, una serie de obstáculos que pocos pudimos ver (no sé si otro predijo lo mismo que yo), llevo a la realidad que tanto el Dart como el Chrysler 200, nunca encontraron su lugar en el mercado.

El fabricante de automóviles había planeado construir al menos otros siete vehículos en la misma plataforma que el Dart, pero sólo otros dos llegaron a la producción.

Aunque construido sobre una vieja plataforma que había sido utilizado en Europa en el Alfa Romeo Giulietta, el Dart no se puso en marcha con la transmisión prevista nueva de nueve velocidades automática de ZF Friedrichshafen, que habría proporcionado significativamente mejor economía de combustible. La transmisión no estaba preparada para el vehículo.

En cambio, la empresa obtuvo una transmisión Hyundai de seis velocidades automática y una de doble embrague en seco de seis velocidades de Fiat. El vehículo se empezó a vender con una calificación de economía de combustible combinado de 29 millas por galón, que estaba a la par con muchos de sus competidores, algo que sería mortal, ya que no era nada especial.

Además cuando el Dart llegó a los concesionarios tuvo un problema más grande de lo esperado, que fue surgido por la transmisión, ya que el lote inicial de los Dart enviados a los concesionarios en 2012, tenía sólo transmisiones manuales, lo que limitó la capacidad de muchos potenciales clientes, que solo saben conducir con transmisiones automáticas.

La transmisión de doble embrague en seco, muy popular en Europa, cayó mal con los consumidores, ya que los gustos son completamente distintos entre Estados Unidos y Europa. Como resultado de este fiasco, la compañía reportó ventas de sólo 25.304 Dart en el 2012.

Con fuertes incentivos de arrendamiento en algunas regiones, trabajaron durante un tiempo. Y las ventas del Dart alcanzaron su máximo en marzo de 2015, con un registro de 9,572 vendidos ese mes. Sin embargo, cuando las ofertas de arrendamiento se cayeron en mayo del 2015, las ventas totales mensuales empezaron a caer en picada, lo mismo pasó con el Chrysler 200.

“Vamos a tener una respuesta para esto, y espero que sea pronto, hay opciones viables y reales “, aseguró Marchionne.

Para mi entender, tanto Chrysler como Dodge deben de ser apuntaladas con modelos modernos para un público joven, sino en unos años estarán en la mesa del olvido como lo están la Plymouth, Mercury, Oldsmobile, Pontiac, Saturn, Hummer, que no han sabido o no han podido, estar a la altura del exigente y competitivo mercado americano.